El cuello es una de las partes del cuerpo más importantes durante nuestro descanso nocturno diario. Cuando adoptamos la postura horizontal en la cama siempre tenemos que tener en cuenta como queda nuestro cuello. De lo contrario, nos exponemos a sufrir dolor cervical que puede llegar a extenderse hacia la espalda. Pero, ¿cómo debemos dormir si nos duele el cuello?
Intentar encontrar la postura neutral sería la respuesta más genérica, pero entrando en detalle se debería descartar la postura boca abajo, donde el cuello sufre porque se ve obligado a ir para atrás. Tanto si se opta por una posición boca arriba o ladeada la importancia de la almohada usada cobra valor. Dependiendo del dolor muchas veces se recomienda usar una almohada supletoria para equilibrar la postura y evitar así la sobreexposición del cuello a tensiones innecesarias. Aún así, como cuello solo hay uno y no lo podemos cambiar, la mejor recomendación es consultar con un médico y/o fisioterapeuta especializado, cuál debe ser la mejor solución en cada caso.
Si el dolor de cuello desemboca en dolor de espalda el problema aumenta y las alternativas (forzadas) a la hora de dormir crecen. Desde usar una una almohada enrollada debajo de las rodillas a reforzar la zona de la espalda baja para liberar la columna de todo tipo de rigideces, pasando por una posición más costal donde una almohada entre las piernas podría aliviar el dolor.
Hay que tener en cuenta que se trata de zonas muy delicadas por la importancia estructural que tienen en nuestro cuerpo. Si no prestamos atención y nos dejamos vencer por el cansancio, el dolor puede permanecer e incluso agravarse, lo que hará difícil que nos relajemos y descansemos adecuadamente, Levantarte dolorido no es la mejor sensación para empezar el día y si para evitarlo hay que corregir la postura durante la noche, no nos quedará otra. ¡Hay que cuidarse!
El dolor de cuello durante la noche puede ser una causa de insomnio o de que nos cueste más tiempo dormirnos. Al mismo tiempo, la falta de horas de sueño y de descanso por una mala noche puede hacer que al día siguiente nos duela incluso aún más. Además de cuidar nuestra postura, tanto al dormir como durante el día, si el dolor de cuello no nos deja dormir, existen soluciones para aliviar el dolor y ayudar a dormir mejor simultáneamente. ¡Pregunta en tu farmacia!
