Consecuencias de no dormir bien

Los efectos de no dormir por la noche son en cierta forma irreparables, porque las horas que has perdido de sueño ya no se vuelven a recuperar. A veces esas noches sin dormir pueden ser por fiestas, reuniones con los amigos, la familia o ocasiones puntuales en las que no dormimos lo suficiente, pero por propia voluntad. Quizá estas sean las horas en las que efectivamente se duerme menos, pero uno se va con un buen sabor de boca a descansar hasta que el cuerpo diga basta. En cambio, también se presentan otro tipo de situaciones más habitualmente, como despertarse a media noche porque hay que cambiar el pañal al bebé, porque se sufre algún dolor o molestia, o porque simplemente se padece de insomnio. Esta última circunstancia es además más frecuente de lo que parece, ya que como sabéis, según la OMS cerca de un tercio de la población adulta tiene problemas para dormir de forma ocasional.

El 10% de la población mundial sufre de insomnio, entonces porque no cambiar la rutina del día a día en pro de una mejor salud. La falta de sueño tiene consecuencias también en nuestro estado de ánimo. Por ejemplo, cuando dormimos poco, estamos más irritables e incluso parece que  nos levantemos con ganas de discutir con todo el mundo.  Ante la falta de sueño nos volvemos más susceptibles, y es más probable que acabemos enfadándonos por minucias que en caso de haber dormido bien no hubieran dado lugar a problema alguno. En definitiva, las consecuencias de no dormir, además de ocasionar problemas de salud, también pueden afectar a nuestras relaciones con amigos, pareja o familia.

Además de estos puntos mencionados, ¿sabéis que nuestro rendimiento se ve mermado en un 25% por cada 24 horas de falta de sueño? Además, es más fácil que cometamos errores porque la falta de sueño afecta a la capacidad de concentración. Por ejemplo, ¿recordáis el día que os habéis dejado la lavadora encendida, las llaves de la casa en la mesita de la entrada, o mejor, aún aquella situación en la que buscáis como unos desesperados las gafas y de pronto os miráis al espejo y por sorpresa lo llevabais todo el tiempo encima? Es probable que la noche anterior no durmiérais lo suficiente.   Todos estos despistes pueden ser consecuencia de no dormir…y por ello, alguna parte del cerebro ha decidido tomarse una pequeña siesta. Algunos estudios realizados con personas que no habían dormido 24 horas, dieron como resultado una disminución en la capacidad cognitiva similar a la que sufrirían personas con un índice de alcohol en sangre de alrededor del 0.10%. Y todos sabemos que no se debe conducir o manejar maquinaria cuando no hemos dormido bien o sentimos somnolencia. ¿Quieres saber más sobre las consecuencias de no dormir bien por la noche? Te las resumimos a continuación.

Inconvenientes de no dormir lo suficiente

 

 

Como hemos leído hasta el momento, la falta de sueño tiene varias consecuencias tanto a nivel cognitivo, como a nivel físico. Así las consecuencias de no dormir lo necesario pueden tener los siguientes inconvenientes:

  • Comer más (y posibles problemas de obesidad) Ante la falta de sueño se tiende a ingerir más comida de lo habitual: los médicos hablan un consumo extra de alrededor de 300 calorías. Además, no dormir lo suficiente también puede afectar al metabolismo y a la digestión.
  • Vida. Dormir es salud, como bien mencionamos en nuestro artículo del “Día Mundial el Sueño 2017”. Según la Sociedad Española del Sueño (SES), Dormir profundamente, nutre vida. Por lo tanto, dormir bien es vital para nuestro bienestar: para reponer energía, para estar de mejor humor, para responder mejor a los problemas que se puedan presentar en el día a día, etc.
  • Presión arterial. Hay estudios sobre la relación del sueño y la tensión arterial que sostienen que la falta sueño podría tener consecuencias cardiovasculares, como por ejemplo, una presión sanguínea más elevada.
  • Todos necesitamos dormir bien, pero para los deportistas, personas que van al gimnasio de forma regular, o personas con un desgaste físico importante, el descanso y el sueño son fundamentales. Para los deportistas dormir bien es esencial si quieren mantener su rendimiento deportivo, por ello algunos deportistas de élite incluso tienen un “coach” de sueño.

Antes de finalizar este artículo queremos recalcar que hay tres factores que necesitamos si o si para dormir correctamente:

  1. Duración. En este punto no hay término medio, es simplemente lo que necesite vuestro cuerpo para estar atentos al cien por cien la mañana siguiente. Lo habitual para la mayoría de los adultos es dormir entre 7 y 9 horas al día.
  2. Lo aconsejable es dormir sin despertares intermitentes.
  3. Solo durmiendo de manera profunda estaréis listos para enfrentaros a todas las actividades de la mañana siguiente.

Ahora que sabes las consecuencias de no dormir lo que realmente el cuerpo necesita, te aconsejamos que, en la medida de lo posible, cuides tu sueño y intentes dormir lo suficiente. ¡Sólo así evitarás un mal despertar!

Sigue descansando